Una semana sola me ha hecho pensar que es la soledad.
Para mi han sido días reconfortantes, haciendo las cosas sin presión ni horario,
descansando como hace mucho no lo hacía.
Sin embargo para muchos la soledad genera miedo, tristeza y un inquietante
estado de aislamiento, aunque estar sola no es necesariamente estar aislada.
Pienso que cuando la soledad genera miedo es porque realmente no nos tenemos.
Solo se que la soledad puede ser una buena amiga que nos motiva a relacionarnos
con nosotros mismos para así aprender a conocernos y amarnos.
Ella nos regala un momento de reflexión necesaria en nuestras vidas.