Amar libremente sin tener la necesidad de sentirme
correspondida por las personas que comparten mi vida. Buscar el amor infinito,
aceptando mi independencia sin importar las distancias ni las condiciones y disfrutar
la vida con desapego.
Durante miles de años he ido cultivando experiencias y
vivencias que hoy sé pueden abrir la puerta más profunda y ayudarme a descubrir
quien soy en realidad.
Reconocerme como alguien dispuesto a ofrecer amor
incondicional. Abrir la puerta del desapego sintiendo amor y respeto por todo
aquello que rodea mi vida sin sentirme atada a ninguna circunstancia ni lugar.
Enfocándome hoy en la belleza que hay dentro y desde adentro
brillar hacia fuera. Cuidando mi cuerpo, cultivando mi alma.
Sintiendo que aquellas personas que un día pasaron por mi
vida dejando heridas, son solo seres en un camino de evolución. Y que las
heridas se suavizan , desapareciendo y
transformándose en libertad, aquella que me deja vivir experiencias
nuevas y plenas disfrutando y compartiendo este inmenso amor.
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